Hace unos días publicamos un post donde os dimos unas pautas para conseguir que vuestro perro aprenda a acudir a la llamada y os prometimos que escribiríamos otro con el mismo tema pero hilando fino.
Vamos allá 😉
Intentaremos utilizar siempre la misma señal. Si es AQUÍ intentaremos alargar la A y acortar la QUI y la diremos siempre igual.
No utilizaremos nunca el nombre del perro para llamarlo. Solo utilizaremos el nombre para que nos mire.
Lógicamente hay que tener muy trabajado el FOCUS y asegurarnos de que el perro tiene contacto visual con nosotros a la mínima señal de FOCUS que hagamos.
Recuerda que debemos llamar su atención con un ruido, beso, chasquido o su nombre suavemente cuando estamos cerca y con silbido fuerte o ruido fuerte o grito cuando está lejos.
Debemos hacer el gesto con las manos de «venir aquí» como una azafata de avión o como un aparca coches, después de haberle pedido que venga y sin dejar de mirarlo.
La mirada debe ser de alegría y de admiración y al llegar a vuestro lado debéis premiar a vuestra mascota con caricia o chuche o juguete.
Si lo deseáis podéis terminar el ejercicio con un SIT y un QUIETO.
Durante el proceso de venir hacia vosotros no debéis perder el contacto visual ni despistaros hablando con el teléfono o con el vecino.
No utilicéis su nombre y sobre todo no lo repitáis.
Si no acude no os enfadéis porque le vais a fijar un trauma ligado a la llamada y tendrá miedo de acudir.
En estos casos deberéis trabajar primero en una habitación, luego en la casa, luego en un parque cerrado (por ejemplo en Don Perro) y luego cuando todo esté dominado en un parque abierto, con una cuerda muy larga y muy fina atada por ejemplo a vuestro tobillo.
Y por supuesto en los cursos de obediencia de 15 clases en Don Perro dominareis esta técnica y otras muchas para que la convivencia con vuestras mascotas caninas sean maravillosas.